Hasta el jueves 23 de enero, la borrasca Garoé ha arrojado importantes lluvias en la sierra y en la campiña loreña, permitiendo que los embalses de los que se surte Lora del Río hayan incrementado sus reservas hasta niveles muy aceptables, en concreto el embalse del Retortillo está desembalsando algo de agua, al encontrarse a un 93%, el embalse José Torán se encuentra a un 72% y el Bembezar se encuentra a un 65%.
Podemos decir que la «otoñá» ha sido impecable, además el agua ha caído de una manera tranquila, permitiendo que la tierra la trague y no se produzcan escorrentías que terminan llevándose los nutrientes y las tierras.
En cuanto a los litros caídos, el día 22 de enero se esperaban más pero solo cayeron 5 litros por metro cuadrado, sin embargo el día 23 de enero han caído 23 litros, que suman 88 litros por metro cuadrado desde el día 20 de enero.
En total en este mes de enero van caídos 111 litros por metro cuadrado, convirtiéndose en el tercer enero que más ha llovido desde el año 2001.
Si miramos las precipitaciones del año hidrológico que va desde el 1 de octubre hasta el 30 de septiembre ya llevamos medidos 500 litros por metro cuadrado.
En los próximos días una nueva borrasca entrará en España, la borrasca EOWIN, y Gaoré nos abandona definitivamente.